Amoríos.

Mil amores pasan por la vida y siempre dejando enseñanzas, te fortalecen durante un gratil momento pero te desechan toda su basura en cuestión de segundos. Siempre tratamos de dar lo mejor para que el otro esté conforme y nunca nos deje, porque es nuestro deseo estar a su lado, porque es nuestro deseo nunca soltarlo. No busco hacer rimas, no busco hacer versos, son solo palabra que recuerden los besos, aquellos que nos dieron con tanta pasión llenos de rencores pero llenos de pasión. Cuando uno tiene a su lado el amor que ah buscado, todo tiene sentido, es encontrar el rumbo aunque nunca sabemos donde nos lleva, nunca sabemos donde te da el tumbo. Buscamos muy dentro y vemos muy fuera, es que ellos son todo, ellos que te dejan sin nada.
Los amores se adueñan de todo incluso de ti, ellos creen que pueden hacer con nosotros lo que quisieran, pero eso duele, duele la uña que encarna y duele el corazón cuando rompe, duele un beso de despedida y un ultimo adiós. Así duele todo aunque el amor sea puro, todo se lo lleva, pasa y deja mil secuelas y a los minutos te olvida.
Hay gente que busca el todo y gente que se interesa por la nada, es que tanto se busca que nada se encuentra, es que mirando sus ojos siempre perdemos la coherencia, es que mirándolos un momento todo brilla y te sosiega. Los amoríos son muertes profundas que a uno le cuesta cicatrizar y entonces todo duele muy dentro y entonces todo se encuentra muy fuera. No dejemos que el amor muera, porque en eso consiste la vida, en dejarnos llevar y perdernos en ellos es que lo son todo cuando te dejan siempre sin nada.